III Cronometrada de Sierro (26 Nov 2016)

III Cronometrada de Sierro

Sergio Capel y Clemente Simón se imponen en la final del Andaluz de Cronometradas

Este fin de semana nos hemos desplazado hasta la comarca del Valle del Almanzora, en la provincia de Almería, a un pequeño y bonito pueblo llamado Sierro situado en un idílico entorno al pie de la Sierra de Los Filabres.

Ahí se disputaba la última cita del Campeonato Andaluz de Cronometradas, una prueba que discurría por la carretera que une de la localidad almeriense de Suflí con Sierro, y estaba organizada por el Automóvil Club Balcón del Almanzora.

Desde el viejo puente de piedra que se eleva sobre el río Boloyunta nada más acceder al pueblo, hasta el Castillo de Sierro, un Bien de Interés Cultural ubicado en la cima de la alquería que remonta sus orígenes al periodo preislámico y desde el que se puede ver Somontín, Lúcar y Urracal -la parte alta del valle del Almanzora-, todo en Sierro tiene un aire literario y romántico.

Sierro conserva aún algunas de sus calles empedradas y de trazado sinuoso que te transportan a tiempos pasados e invitan al paseo, a respirar sosiego y tranquilidad. Realmente parece que el tiempo se ha detenido en Sierro. La belleza de sus casitas blancas -algunas aún de piedra-, la hospitalidad de sus vecinos y la paz que aquí se encuentra hacen que merezca la pena el viaje. Una estampa ideal para el turismo rural.

Terminado el paseo por las bonitas calles de Sierro llegamos al Asador «El Maestro», una antigua almazara ahora convertida en restaurante donde se llevan a cabo las verificaciones administrativas, un espacio bastante diferente a lo que estamos acostumbrados y quizás uno de los sitios más acogedores en el que hemos estado para estos trámites pre-carrera. Su propietario, Oscar Muñoz se encargó de que todos disfrutáramos de un café calentito en esa fría mañana.

Tras las administrativas llegaban las verificaciones técnicas y posterior parque cerrado en el polideportivo, un espacio lúdico en las afueras del pueblo donde contrasta la pared llena de verde hiedra con las bonitas vistas que genera el Castillo.

Tras el almuerzo llega la hora de la verdad y la caravana de coches sale del pueblo y baja la carretera A-6101 hasta el punto de salida. Comienza la pasada de entrenamientos, donde el almeriense Miguel Angel Clemente hace el mejor tiempo con 00:47’071 seguido de Clemente Simón y su SpeedCar Xtrem con 00:48’497.

En la primera manga oficial es Clemente Simón y su car-cross los que marcan el mejor tiempo, seguido de Miguel Angel Clemente con Fiat Punto s2000 y Sergio Capel con su Clio.

En la segunda pasada oficial se repetían las mismas posiciones de la anterior, dejando casi sentenciado el resultado final a falta de la tercera pasada que se suspendía por una salida de pista.

Vencedor de la prueba fue Sergio Capel entre entre los turismos con Renault Clío, seguido de Mario Ezequiel Morillo con Citröen AX y de Cristóbal Palacios con el Cosworth.

Capel fue además vencedor de Clase III, Morillo de Clase II y Palacios de Clase IV. (Gonzálvez con AX no puntuaba). Juan Francisco Ceba con AX fue el vencedor de la Clase I.

Miguel Ángel Clemente, con Fiat Punto, que participaba en Clase VI sin optar a la general fue el más rápido entre los turismos.

Mientras tanto, entre los Monoplazas, Clemente Simón fue el primero seguido de Álvaro Molina y Juan Manuel Santos.

Como campeones de Andalucía han terminado Sergio Capel y Álvaro Molina.

La ceremonia de podio se encargan de repartir los premios el alcalde de Sierro, don Juan Rubio Cano y Salvador Segura, presidente del Automóvil Club Balcón del Almanzora, haciendo mención también a al resto de colaboradores como son AP Marmoles, Carpas Toldec, Extintores Drago, Imprenta Lucmar, Limpiezas Keyta y Cultura Racing como medio oficial.

Y recuerda que nos vemos el 17 de diciembre en el II RallyCrono de Cantoria «Perla del Almanzora», donde una vez más el Automóvil Club Balcón del Almanzora nos tiene reservado un tramo espectacular y técnico. La última prueba puntuable del año para acabar este 2016 con el casco puesto y la adrenalina a mil por hora.